La primera Copa del Mundo de la FIFA disputada en Uruguay en 1930, tiene un sinfín de curiosidades.
Hoy nos vamos a centrar en un hecho que aconteció en el partido semifinal entre Estados Unidos y Argentina, disputado el 26 de Julio en Montevideo.
En un momento del juego, el delantero estadounidense James Brown sufrió un golpe y se solicitó la asistencia médica.
Ingresó al campo de juego a atenderlo Robert Millar, que cumplía las funciones de entrenador, preparador físico y kinesiólogo.

En su apuro a Bob se le cayó el maletín, con tan mala suerte de que se le destapó un frasco de cloroformo.
El contenido se derramó en el césped y afectó de inmediato al entrenador, que sufrió una descompensación.
Al final pasó de atender a uno de sus futbolistas, a ser atendido por los mismos, un caso muy curioso que aconteció en ese primer mundial.
Estados Unidos cayó goleado ese día 6 a 1 por Argentina, pero igualmente firmó su mejor actuación en una Copa del Mundo.
En cuanto a Millar, digamos que era escocés de nacimiento, iniciando su carrera como jugador en el Saint Mirren, hasta que en 1912 emigró a Estados Unidos, donde jugó y dirigió varios equipos, incluyendo al seleccionado entre 1928 y 1930.
Antony Callero